En colaboración con Fondazione per la Sussidiarietà
Domenico Fanizza, Director Ejecutivo para Italia, Portugal, Grecia, Malta, Albania, y San Marino en el FMI; Eduard Heger, Primer Ministro de la República Eslovaca; Corrado Passera, Fundador y Administrador Delegado de Illimity Bank; Rajan Raghuram, Katherine Dusak Miller Profesor Distinguido de Finanzas en la Universidad de Chicago Booth School of Business. Introduce Samuele Rosa, Economista Senior en el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El reto del COVID ha hecho más evidentes las deficiencias de la economía global. En consonancia con un reciente informe del Banco Mundial, el COVID-19 ha provocado un colapso masivo del crecimiento, ya que las economías de todo el mundo han impuesto estrictas medidas de contención para controlar la propagación del virus. Estas perturbaciones de la oferta y la demanda se han extendido más allá de las fronteras, obstaculizando el comercio y reduciendo la actividad económica mundial. El reto no se limita a los países en desarrollo, la pobreza y la desigualdad aumentarán potencialmente en toda Europa, socavando la cohesión social entre los países.
Las tres palabras del título ilustran varios momentos de una posible recuperación. En primer lugar, ¿cuál puede ser el papel de las finanzas para apoyar una recuperación económica integradora? En segundo lugar, ¿cómo deben entenderse los territorios como fuente de creación de valor para un crecimiento sostenible, dentro de un enfoque subsidiario? Por último, con respecto a los esfuerzos de los países europeos por definir caminos de recuperación, ¿cómo se conjuga la exigencia de sostenibilidad de la deuda con la prioridad de sentar las bases de un desarrollo orientado al bien común y a la equidad intergeneracional?