Saverio Allevato, ex responsable de católicos populares-Roma; Agostino Giovagnoli, historiador; Agnese Moro, periodista publicista, hija de Aldo Moro. Introduce Salvatore Taormina, Redacción Cultural del Meeting por la amistad entre los pueblos. Modera Angelo Picariello, Periodista de Avvenire, autor de Una azalea en calle Fani, Ed. San Paolo.

Aldo Moro (1916-1978) es una figura de extraordinaria relevancia en la historia de la República, pero la “herida” causada por su secuestro y por la incapacidad colectiva de sustraerlo a una muerte injusta son a menudo fuente de una injusticia ulterior que limita su recuerdo a esos 55 días dramáticos. Después de 45 años, liberarlo finalmente de esa “prisión” permite hablar de temas de gran actualidad a través de su vida, en la que emerge la centralidad de la persona (que caracteriza nuestra Constitución, con su decisivo impulso) y la constante tensión a la unidad y a la positividad de la realidad. La política como servicio al bien común no le quitó nunca tiempo para sus alumnos y jóvenes, especialmente en los turbulentos años de la Contestación, en la que mantuvo una relación asidua y discreta también con algunos estudiantes y sacerdotes de la comunidad de Comunión y Liberación de Roma. Una política así concebida, lo hizo también gran protagonista de iniciativas de paz y diálogo, en medio de la Guerra Fría.