EL ABISMO ENTRE ESTAR SOLO Y TENER UN ALIADO. LA PASIÓN POR EL CUIDADO
Lorenzo Berra, Massachusetts General Hospital, Boston; Raffaele Donini, Coordinador de la Comisión de Salud de la Conferencia de las Regiones; Maurizio Marzegalli, Vicepresidente de la Fundación Maddalena Grassi, Milán. Marco Maltoni, Director de la Unidad de Cuidados Paliativos de Romaña, Forlí.
Incluso en la relación de tratamiento, como en el resto de la vida, se puede engañar. Quien está enfermo puede fingir que no lo está, quien cura puede fingir que la enfermedad y el sufrimiento del otro no le conciernen. Demasiado duro para soportar la mirada del dolor. ¿Y luego? ¿Hasta cuándo se sostiene esta apariencia? ¿Y qué conveniencia tiene? Quien puede (el cuidador) huye y quien no puede (el enfermo y su familia) resiste y se resigna o, modernamente, puede buscar nuevas formas de escape. Eso es todo. Y se evita el quid de la cuestión. En la relación de cuidado, ¿hay espacio para una “pasión por el hombre”? Una pasión que el cuidador desea, además de para los propios asistidos, también para sí mismo. ¿Hay lugar para un deseo de Infinito que perfore la capa de hipocresía o desesperación? ¿Existe la posibilidad de un camino personal que conduzca, desde la natural y legítima inaceptabilidad del sufrimiento y de la dependencia, a la maduración de un grito que busque la Respuesta necesaria para vivir? Los relatores narran la propia experiencia humana y profesional de compañía en la búsqueda común, de quien cura y de quien es curado, de la Mirada necesaria para estar frente a la mirada de la vida y del dolor.